Teniendo claro en este punto la motivación de mi presencia en este
curso, al final del proceso se impone un balance. Un primer componente de esta experiencia es
contar con una definición operativa del aprendizaje como aquello que subraya la
práctica, conciente y continua, del desarrollo de habilidades que permiten la adquisición, síntesis y generación de nuevo
conocimiento.
El desarrollo tecnológico en general y de las TICs en particular ha
impregnado todos los aspectos de la cultura y la vida cotidiana de forma
tal que la educación y sus prácticas no pueden quedar al margen de su
influencia. Este hecho es irreversible y como tal debemos abordarlo para dar un
sentido a esas prácticas que permitan superar la mera
manipulación instrumental.
El tercer elemento es la
evaluación como ejercicio que no se limita a la acreditación o certificación de
conocimientos; sino también a los procesos y los recorridos que atraviesa el
aprendizaje.
Entonces, sobre las ideas que se desarrollaron de la
evaluación se articuló esta última con el proceso de aprendizaje y las
herramientas tecnológicas ofrecidas; un descubrimiento en si mismo. El curso,
en ese proceso creció en calidad, la consistencia de su diseño nos permitía
replicar en nuestra propia vivencia las tensiones y temores que son propios del
acto educativo, en el marco de una contención motivadora. Quiero resaltar en este aspecto lo que ha
sido, para mí, tal vez el hallazgo, la
iluminación de este curso: contra cualquier presunción, la presencia del
docente y el intercambio con los concursantes tuvo una intensidad que debería
ser el atributo distintivo de los cursos presenciales. El interrogante queda
abierto: es el logro de una acertada conjunción de la teoría y la práctica
desplegada, o la triste evidencia de la pobreza de nuestras prácticas
cotidianas. Como sea, es suficiente estímulo para comenzar un camino de aquí en
mas que nos permita resolver esa
incógnita. Tenemos pues un caja de herramientas cargada de valores, conceptos y
prácticas nuevas; será nuestra capacidad y voluntad las que inclinen o acoten las restricciones.